En una ocasión la vieja farmacia de la esquina del barrio había sido vendida, por lo que durante varios días permaneció cerrada mientras sus nuevos dueños remodelaban su interior, pero más llamativo que eso era un cartel que habían colocado en la ventana con un texto que decía lo siguiente:
"Por reinaguración ofreceremos una antigua receta
para nunca más tener problemas difíciles, y será gratis"
Ante semejante anuncio todo el barrio comenzó a comentar sobre lo legítimo o engañoso que podría ser tal oferta. A pesar de los incrédulos y murmuradores, el día de la apertura había cientos de personas ávidas por tomar su casi mágico medicamento que además era gratuito. Uno por uno pasaba a una pequeña oficina donde recibían un sobre de papel junto a una pequeña capacitación para el uso de la medicina.
Muchos salieron decepcionados, mientras otros mostraban la ilusión por lo que habían recibido de manos del médico, pues dentro del sobre había solo un papel con un pequeño texto y unas instrucciones al final que decía lo siguiente:
Receta casera de Mascarilla de Pasado:
Ingredientes:
Ingredientes:
Tome dos hojas de cuaderno, un bolígrafo, una tijera y cinta adhesiva.
1. Doble las hojas de modo que le queden cuatro partes, y recórtelas
2. En tres de los 8 pequeños papelitos escriba sus tres problemas más importantes que está viviendo en la actualidad.
3. En los 5 restantes, haga un esfuerzo y recuerde 5 problemas muy grandes que haya vivido en el pasado, y que los haya superado. Escriba uno por cada papel. No olvide poner al final de cada texto, la frase: Lo superé!!.
4. Elija un lugar de su casa donde cada día lo pueda ver, puede ser junto al espejo o a la puerta de salida.
5. Ahí, pegue juntos los tres primeros papeles que escribió.
6. Luego, pegue encima los siguientes 5 papeles, de forma que pueda cubrir los anteriores, aunque no del todo.
7. Cada mañana, antes de salir a sus actividades lea en voz alta los problemas que ya superó, y confíe que esa fuerza que en el pasado lo ayudó a superarse, a pesar que también el futuro se veía sombrío, de igual forma lo sacará adelante en esta ocasión.
Si cada mañana hace esto, después de algunos días verá cómo sus problemas van pareciendo menos difíciles, mientras su confianza interior crece.
Luego de unas semanas, el barrio tenía un cambio: Los incrédulos se veían más infelices, y quienes habían seguido la receta mostraban esperanza y optimismo, el suficiente como para no tener más problemas difíciles.
¿De cuales de los dos es usted? ¿Se anima a seguir la receta?
Famel Vasquez
Diplomado Superior en Diseño y Gestión de Proyectos de Desarrollo
Twitter: @famelnet
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