Cuenta una vieja historia sobre dos enamorados que…
Él siempre le traía nuevas canciones para que su amada encuentre paz en medio de sus dolores. Ella sufría de una cierta enfermedad que no tenía cura. Él llenó de flores toda la habitación del hospital, ella llenó el corazón de su amado con una sonrisa de agradecimiento. Él había logrado que los médicos permitieran cumplir el más alto capricho de su novia: pintarle las uñas de sus manos; pues ella quería sentirse linda para recibirlo. A veces su dolencia desaparecía ante la luz de su amor.
Su llanto era descontrolado, y sus gritos inundaron cada habitación del hospital. Sus lágrimas habían mojado la mitad de sus brazos, y en el suelo se mezclaban con el agua de un vaso que había dejado caer. En medio de todo este dolor, la enfermera entregaba las pocas pertenencias de la difunta, entre las cuales figuraba un pequeño diario, en cuya primera hoja se podía leer lo siguiente: “Los días más felices de mi vida, gracias MI AMOR”
Después de leerlo, entendí el poder del amor. Porque en los tres meses que duró su enfermedad, compartimos más amor que muchas parejas con diez años de matrimonio. Cada día lo vivimos como si fuera el último, pues eso es lo que decían los médicos. Por eso cada segundo le regalé la mejor sonrisa, mis mejores caricias, nunca le reproché el pasado pues ya no importaba, recuerdo que tuvimos algunas discusiones, pero desaparecían instantáneamente al recordar el valor de disfrutar nuestro tiempo, juntos. Cada día le llevé una nueva canción, y cada día ella me daba una nueva sonrisa que iluminaba mi mundo. Por todo esto, ahora que han pasado tres años, hay días que no estoy seguro si esa triste enfermedad fue un problema o una oportunidad para conocer el poder del amor.
Yo diría que esta fábula nos muestra un amor tan intenso que parece fuera de este mundo, un amor extraterrestre. Pues el Amor es una fuerza sobrenatural que hace que un solo día sea más importante que todo un año, hace que una hora en el teléfono parezcan dos minutos, hace que estas dos palabras, “te amo”, sean más importantes que mil libros. Ofrece fuerzas al cansado, inspiración al necesitado, una sonrisa en la tristeza. Bien lo decía Gandhi "El amor es la fuerza más humilde, pero la más poderosa de que dispone el mundo."
Tanto en los negocios, proyectos, desafíos, tareas, estudios, metas, etc.…la enseñanza es sencilla e increíblemente poderosa: Enamórate y serás invencible.
Famel Vasquez
Licenciado en Comercialización
